Debían ser más de la una de la madrugada, y la oscuridad total bañaba el bosque por completo que rodeaba el campamento de Hiram, cuando un rugido me despertó de un plácido sueño.
- What the hell?!...Mierda- pensé- alguna de las niñas ha metido comida dentro de la tienda y se nos ha colado un animal dentro.
Eran tiendas de campaña muy diferentes a los que estamos acostumbrados: era una gran lona de aspecto militar con unas 12 a 15 literas de hierro con colchones y mantas dispersas por ella, sobre un suelo de cemento.
Me incorporé un poco para ver si podia ver algo, pero las literas no me permitían ver nada. El rugido continuaba, era intermitente y gutural y procedía de algun lugar en la parte posterior de la tienda.
-Joder, pues si que está furioso el bicho. ¿Será un mapache? Esque suena muy feróz para ser un mapache. Como sea una mofeta loca la liamos- no era raro que los mapaches campasen a sus anchas, alguna que otra mañana me había levantado con huellas de sus patas sobre mi saco de dormir, lo cual me indicaba que se había estado paseando sobre mi sin yo inmutarme, me imaginaba al mapache olisqueandome con cara de curiosidad, ese día me dí cuenta que dese luego cuando duermo lo hago profundamente- Pues una de dos o es un bicho más grande, por dios que no haya osos por aqui...- lo cual me acojonaba bastante- o el mapache en cuestión tiene la rabia y se ha vuelto loco...Mierda, cualquiera de los casos pinta mal. Yo me las cargo, juro que mañana me las cargo, mira que les tenemos dicho que no traigan comida.
No me atrevía a moverme y ni siquiera me atrevía a apuntar con la linterna hacia la dirección en la que procedía el rugido por dos motivos, una, no fuera que el animal se asustase y provocara aún más su agresividad y en segundo lugar, para no despertar a las niñas y que se organizase un gran revuelo o alguna acabase malherida.
Pasé un rato callada agudizando el oido para ver si notaba cambios en el animal, si le oía moverse, o me daba alguna pista de lo que podía ser. Durante ese rato, que mi cabeza iba a mil revoluciones por hora pensando en que hacer, me di cuenta que la niña que dormía en la litera superior a la mía estaba despierta asique en voz baja me atreví a preguntar:
-¡Ey! ¿Qué es eso? ¿Qué es ese ruido?
-PARIS- me contestó en susurros con una nota de desesperación en su voz.
Paris era una niña de catorce años de color, que me sacaba dos cabezas y era de ancha como cuatro veces yo, que estaba roncando como si tuviese conocimiento la muy cabrona.
- ¡Ufff! Menudo susto, ya me quedo más tranquila, ¡pensé que era un animal!
- ¡No me extraña!- dijo la niña.
Resuelto el misterio y calmado el resuello, me di la vuelta y me volví a dormir.
5 y tu que me cuentas:
Jajajajja, esa niña tendrá problemas conyugales en el futuro..
Besos.
jeje,
pero el paseo quién lo quita?
besos Gal
JAJAJAJAJJAJA
Madre mía! Me recuerda a mi padre, que se le oye des de la otra punta del piso! xD
jajjajajaja vya con la niña, cuando me iba de acamapada siempre había algún niño así, pero no tanto XDD
Besetss
Pues joven parece para empezar con las dichosas tiritas en la nariz o los jarabes para no roncar.
Pobrecilla....yo me lo haría mirar.
;D
Besos guapa.
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